Beneficios de la sandía
El árbol del verano/ intenso,/invulnerable,/es todo cielo azul,/sol amarillo,/cansancio a goterones,/es una espada/sobre los caminos,/un zapato quemado/en las ciudades:/la claridad, el mundo/nos agobian,/nos pegan en los ojos/con polvareda,/con súbitos golpes de oro,/nos acosan/los pies/con espinitas,/ con piedras calurosas,/y la boca/sufre/más que todos los dedos:/tienen sed/la garganta,/la dentadura,los labios y la lengua:/queremos/beber las cataratas,/la noche azul,/el polo,/y entonces/cruza el cielo/ el más fresco de todos/ los planetas,/ la redonda, suprema/ y celestial sandía./ Es la fruta del árbol de la sed./ Es la ballena verde del verano.
Así empieza uno de los más hermosos poemarios de Pablo Neruda “Odas Elementales” dedicada a la deliciosa sandía. El poeta no se equivocaba dedicándole unos versos a esta fruta, ya que se merece estas bonitas palabras, ya que tiene unos beneficios muy interesantes en el organismo.
Hagamos un pequeño repaso sobre esta fruta, que ahora está de temporada y no puede faltarnos:
- Su alto contenido en Licopeno, un antioxidante, que conocemos, sobretodo por el tomate, pero que en la sandía también está presente.
- La sandía también está compuesta de citrulina, un aminoácido no proteico, estudiado en la actualidad para la mejora en el post-entrenamiento y la recuperación muscular. Algo realmente interesante para deportistas que se preocupan por su rendimiento. Y que ya está presente en ciertos suplementos deportivos.
- Cucurbitacina, un interesante compuesto químico que hoy en día se está estudiando para su estudio contra ciertos tumores.
- Muchos descartan la idea, pero la corteza de la sandía es comible y contiene más del aminoácido citrulina que la misma fruta; la citrulina se convierte en arginina en sus riñones, que es importante para su corazón, los vasos sanguíneos y salud del sistema inmunológico.
Así que nuestra tradición de poner una sandía en la orilla de playa, ahora más que nunca, es una tradición que no debemos perder, puesto que esta fruta veraniega, parece ser una fruta de propiedades inmejorables, sin contar con su aporte de vitamina-C, su función diurética e hidratante, y su bajo aporte calórico.
Si solo la comes en tajadas, una buena opción es introducirla no solo como postre, sino como ensalada, por ejemplo, con bolas de mozzarella y albahaca italiana, aliñada con vinagre de manzana. También puedes darle un toque moderno al tradicional gazpacho introduciendo sandía como ingrediente principal. O una merienda en forma de batido, solo tienes que añadir leche fría y decorar con nata. ¿Qué te parece?